Sagitario es un signo de fuego, por lo que sus pasiones son exacerbadas, sus límite difusos, su voluntad infinita y sus enojos legendarios.
Junto con Aries forma la dupla más conflictiva del zodiaco. No en vano son los signos que pueblan más cárceles de toda la rueda zodiacal.
No es la venganza bien hilada y premeditada la que lleva a Sagitario a estar un tiempo tras los barrotes del lugar que mata lo que más ama: la libertad, sino su incontrolable impulsividad.
Vemos un poco de su forma de ser antes de adentrarnos en sus explosivos enojos.
Cómo es un Sagitario
Optimista: si hay una mínima posibilidad de que algo salga bien, entonces así será.
Aventurero: cuando tiene la oportunidad de explorar y de descubrir se siente renacer. Su curiosidad es de tal magnitud que no logra ser saciada meramente con los libros, sino que debe descubrir la verdad con sus cinco sentidos.
Entusiasta: es un nativo siempre dispuesto a recibir lo que deba venir y a buscar aquello que quiere que venga. Decaer, deprimirse y dejarse estar no son opciones para quienes han nacido en diciembre.
Temerario: no le tiene miedo a nada más que al aburrimiento, por lo que tomar riesgos es moneda corriente para él.
Intelectual: es un gran estudioso, filósofo y buscador de esa verdad que prometen tener las religiones.
Con todo este panorama tan alentador, ¿qué podría salir mal? ¿Qué tan malo puede ser un enojo de Sagitario? Prepárate… porque no podrás creer lo que se viene a continuación.
Cómo son los enojos de Sagitario
El enojo de Sagitario se puede comparar con la explosión de una bomba atómica, con la única salvedad, y ventaja, de que no deja radiactividad. Esto traducido al ámbito de las relaciones significa que no alberga rencores.
Si bien estalla con gritos, amenazas, alguna que otra rotura de objetos y posibles hematomas en su víctima, apenas se desahogue no quedarán vestigios de la batalla campal que desató.
Qué hace enojar a Sagitario
Que lo quieran dominar: Sagitario es el rey de la libertad, por lo que no te irá nada bien si intentas ejercer tu dominio sobre él. Lo mejor es que lo dejes ser o serás testigo del resurgimiento de Hércules.
La mentira: procura irles con la verdad, ya que la falta de esta los envalentona a ir contra ti como una furiosa tromba marina.
Que no les permitan expresarse: cuando decimos que Sagitario es amante de la libertad, lo es en todo sentido, incluyendo el de expresión. Si por alguna razón coartas esa libertad a la que están tan acostumbrados, serás objeto de su ira.
No ser escuchados: no se te ocurra ignorarnos ni menoscabar lo que dicen. Presta siempre mucha atención a sus palabras, en especial si es que ya se han enojado.
Que critiquen con malicia lo que hacen: Sagitario puede aceptar una crítica constructiva, ahora cuando atacas con sorna e ironía aquello que hace, no tiene problema en hacer caer sobre ti la ira del dragón que lleva dentro.