Diferencias entre la magia blanca y la magia negra


La magia – una unidad que se divide según su propósito

Antes de adentrarnos en las diferencias entre la magia blanca y la magia negra propiamente dichas, daremos un panorama acerca del concepto de magia a nivel general. Se entiende por magia a la modificación de las circunstancias dadas en beneficio del mago o de un destinatario que este elija. El logro depende de la intervención de un mago, hechicero o bruja. También es posible investigar acerca de la magia negra y obtener así la información que necesitas para conocer todo acerca de esta rama del esoterismo.

Lo primero que debemos entender es que no existen dos magias por separado, sino que la magia es una única fuerza y energía a la cual se le adjudica un color según el propósito para el que la usemos.

Diferencias irreconciliables entre la magia blanca y la magia negra

En ocasiones, las diferencias entre dos disciplinas pueden llegar a ser complementarias. Sin embargo, esto no es lo que ocurre cuando pensamos en la magia blanca y en la magia negra, ya que no sólo tienen diferencias filosóficas, sino que persiguen propósitos tan dispares, que una no podría ser utilizada para lograr lo que la otra persigue.

  • Intenciones: la intención de la magia blanca es siempre benévola, mientras que la de la magia negra es maligna. Mientras que la primera busca que, tanto su realizador como un destinatario escogido, sea beneficiado con un hecho tal como mejorar su salud, salvar un examen, obtener prosperidad, bendecir una casa, fomentar el amor, lograr la cura de una enfermedad u otros hechos afines, la magia negra siempre va dirigida a un tercero y lo que se busca es causarle un mal, un dolor, llevar a cabo una venganza, neutralizarlo, destruirlo o incluso matarlo.

 

  • Invocaciones: mientras que la magia blanca invoca a santos, espíritus del bien, ángeles u otros seres superiores a los que se encuentran en el plano terrenal, la magia negra recurre a seres inferiores a las personas que la practican, tales como demonios, duendes malignos, espíritus del mal, entre otros.

 

  • Consecuencias: mientras que la magia blanca permite dos posibles consecuencias: la positiva, que se refiere a la obtención de lo que se pide y la negativa, que se refiere a la no obtención de ello, la magia negra tiene un porcentaje más alto de eficacia, pero nos pasa la factura perjudicándonos en otro aspecto de aquel para el que pedimos ayuda. Es decir, la magia blanca da y la magia negra también da, pero esta última quita el doble en otros aspectos.

 

  • Oración: las oraciones de la magia blanca se basan en la creación y en la construcción, apuntando al enaltecimiento del espíritu y a la dignidad. Sin embargo, la magia negra es pasiva y destructiva, enfocándose hacia una actitud de humillación y de rendimiento.

 

  • Practicantes: las personas que practican la magia blanca quieren llegar a los otros a través de una enseñanza libre, la cual se enfoca a la liberación de la persona de sus miedos y limitaciones. No obstante, la magia negra busca la humillación y el sometimiento de sus seguidores y adeptos.